“Auméntanos La Fe”
Autor: Sergio A. Perelli
“Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe” (Lucas 17:5).
El Evangelio de Lucas es el único de los cuatro evangelios, en registrar aquella petición que le hicieron los discípulos a nuestro Señor Jesús, a lo cual El procedió a contestarles con una frase muy conocida: “Si tuvierais fe como un grano de mostaza…”(vs.6).
La respuesta de Jesús amerita un estudio por sí misma, pero en esta oportunidad solamente me voy a concentrar en el ruego de los apóstoles: “Auméntanos la fe”.
Anteriormente en el versículo uno del mismo capítulo, Jesús había dicho: “¡Imposible es que no vengan tropiezos!”.
La palabra “tropiezo”, se origina del griego skándalon del cual proviene la palabra escándalo en nuestro idioma y que significa:1. Acción que provoca indignación u horror. 2. Alboroto, ruido grande. (Larousse, Diccionario Práctico Escolar).
Y en aquella oportunidad como lo hizo también en otras, les aseguró que en la vida de ellos vendrían situaciones que les ocasionarían escándalo, ‘alboroto’ o ‘ruido’ grande, asimismo les provocarían ‘indignación’ u ‘horror’; y como consecuencia llegarían a “tropezar” en lo que respecta a su fe en Dios.
¿Y cuál fue la advertencia que Jesús les hizo a sus discípulos?“¡Imposible es que no vengan tropiezos!”.
En otras versiones en lugar de usarse la palabra “imposible”, aparece el término “inevitable”.
Una de las cosas que más aprecio del carácter de Jesús es la integridad que El tuvo para con los doce en relación a comunicarles con toda honestidad que ser Su discípulo involucra no solamente tiempos de gozo y paz; sino también de sufrimiento y aflicción.
Fue entonces y después de recibir una instrucción y exhortación acerca de la necesidad de tener un espíritu perdonador, que los apóstoles le suplicaron al Maestro: “Auméntanos la fe”.
Si aquellos hombres que estuvieron un período de tres años bajo el Ministerio personal de Jesús no fueron librados de tener tiempos de adversidad, nosotros tampoco seremos exentos de pasar por tiempos de “tropiezos”.
¿Qué es lo que vamos a hacer? ¡Rogarle al Pastor y Obispo de nuestras almas: “Auméntanos la fe”!
“Los Apóstoles mismos reconocían la pequeñez de su fe y veían la necesidad que tenían de la gracia del Señor para que su fe se incrementase y fortaleciese. Los creyentes deberíamos desear con todo fervor el aumento de nuestra fe” (Comentario Bíblico de Matthew Henry, página 1323). (Continuará)
Gracia y Paz
Sergio
“Amigo de Jesús”